
Coqueta y seductora, amante
que captura con su ritmo eterno, armónico, infatigable
y envolvente como un abrazo que nos deshace
en ella
y nos integra
en un ir y venir de olas que avanzan
y retroceden
y fusionan
tierrayaguayaire.
Arena, mar y cielo,
unión, no límites,
potente en su borrar y mover fronteras,
indolente a naufragios, castillos y fosas
ignorante del fluir del tiempo
y tierna
y sabia como la mirada de una madre
al despedir a los hijos.
Inmóvil y cambiante
en su incesante armonía de darse y retirarse
como una
caricia eterna
que des-hace y crea
y des-integra y funde.
Hay cosas que saben a verano, como la playa o la sapateira recheada (buey de mar relleno). Arriba os dejamos una visión de la primera y abajo la receta de la segunda, este famoso plato que para nosotros es un imprescindible de los veranos en Portugal.
Sapateira recheada o buey de mar relleno
Ingredientes:
- 1 sapateira
- 1 huevo duro
- 1 cucharada sopera de mahonesa
- 50 cl aprox. de vino verde
- ½ cucharilla de café de mostaza de Dijon
- Unas gotas de piri piri (al gusto)
- ¼ de cebolla
- Opcional: pepinillos (2 ó 3 pepinillos)
1.- Lo primero que haremos será cocer la sapateira (lo ideal, ya sabéis, es que sea hembra). Se venden tanto vivas como muertas, pero para cocerla deberá estar muerta ya que si no, al sumergirla en agua hirviendo soltará las patas y se llenará de agua; además, así evitaremos el sufrimiento extra del pobre buey de mar ya que de estar vivo, la forma de cocerlo es poniéndolo en el agua fría y calentarla hasta matarlo. Así, cuando el agua esté hirviendo, sumergiremos (boca arriba) la sapateira y la dejaremos cocer unos 17 minutos aproximadamente.
Importante, el tiempo de cocción dependerá del tamaño de la sapateira, pero para las que encontramos habitualmente en los mercados, que suelen ser de entre 700 y 800 gramos (si están llenas) ese tiempo es suficiente.
Una vez transcurrido el tiempo, la sacaremos del agua y la dejaremos enfriar sin meterla en agua fría ni meterla en la nevera.
2.- Una vez fría, quitamos las patas y las bocas, para acompañar luego el plato; abrimos la sapateira y separamos toda la carne, evitando que queden trocitos de cáscara. Reservamos.
3.- En un bol partimos lo más pequeño posible el huevo duro, los pepinillos y la cebolla, e incorporamos el vino verde, la mahonesa, la mostaza y si queremos, el piri piri. Mezclamos todo bien y una vez integrado todo, añadimos la carne de la sapateria. Integramos todo.
4.- Rellenamos con la mezcla el caparazón de la sapateira, que habremos limpiado y secado previamente, y servimos acompañado de las patas y las bocas.
Y… bon verão!